El piloto español asegura que su escudería tiene un plan de trabajo para
este fin de semana que le puede garantizar el paso a la siguiente fase en la
clasificación sino se topa con inconvenientes.
Usted se preguntara, cómo puede cambiar tanto un coche de un fin de
semana a otro cuando no hay actualizaciones, cuando se lleva el mismo coche de
un lado a otro. Pero en su arquitectura Bahrein no es tan exigente como si lo
fue Shanghái y además tienen pensado afrontar el fin de semana de una forma
diferente, cosa que ya vimos en esta primera sesión en la que Fernando Alonso ha
terminado séptimo.
“Los coches son muy parecidos a China porqué solo han pasado cuatro días
entre ahí y aquí, así que el rendimiento no cambiará mucho, pero si el fin de
semana va bien para nosotros pienso que la Q2 es posible. Quedan muchas cosas
por aprender, pero tenemos un buen programa de pruebas aerodinámicas para los
libres 1, y de neumáticos y otros cambios en el setup para los libres 2,”
anticipaba el español antes de iniciar la actividad.
Tal vez al final del domingo la posición en carrera
termine siendo la misma, pero si encuentran el camino, el resultado final es lo
que menos le importa al asturiano. “Se trata de un fin de semana clave para nosotros
para mejorar, no hay que centrarse en la posición 13, 15 o 17 eso es secundario
para que podamos luchar por cosas importantes. La posición no significa mucho
siempre que nos aseguremos que la dirección es la correcta.”
"No es un monoplaza complicado o exigente, en
cada vuelta te da la confianza en lo que haces y no te da sorpresas, esto es
algo positivo. Además la forma en la que el equipo desarrolla el coche y los componentes
es clara e inteligente.”
"Lo importante es que hay una gran diferencia
entre Bahréin y Barcelona [inicio de la temporada europea], pero al mismo
tiempo tampoco podemos poner toda la expectativa en Barcelona. Tenemos tres
semanas antes de que lleguemos y la gente se piensa que ya lograremos la
victoria, ¡y no es así!"
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