Sid Watkins deja la presidencia del instituto de seguridad de la FIA

Una etapa muy importante, trascendental para la seguridad de los pilotos se ha cerrado en los últimos días al anunciarse que el profesor Sid Watkins se ha retirado del cargo de presidente del Instituto de Seguridad de la Federación Internacional del Automovilismo.

Tras haber estado ocho años en él, su cargo pasará a ser ocupado por Gerard Saillant, mientras que Garry Connelly se hace cargo del cargo anterior de vicepresidente de Saillant.

Sid Watkins

“Ha sido un honor y un gran placer para mi dirigir el Instituto desde su creación. Estoy muy orgulloso de nuestros logros y nuestros planes para el futuro, tanto en términos de seguridad de los deportes del motor como de su sostenibilidad. Espero seguir haciendo una modesta contribución a estos desde mi calidad de nuevo Presidente de Honor."

Richard Woods, secretario general del Instituto de la FIA

“La influencia de Sid en el deporte del motor es una leyenda. En todo lo que ha hecho a lo largo de su carrera ha sido siempre un líder en su campo. La herencia que Sid nos deja en la seguridad del deporte del motor es única”.

Gerard Saillant, heredero en el cargo

“He aprendido mucho trabajando con el Profesor Watkins y ahora como nuevo presidente, estoy ansioso de avanzar su labor. Hemos hecho grandes avances en la seguridad de los deportes del motor y en la sostenibilidad de los mismos, pero siempre hay más cosas que hacer y estoy más comprometido que nunca para asegurar que estos importantes avances continúen”.

Desde que llegó a las pistas de la F1 en 1978 como medico delegado de la categoría, Watkins intentó salvar las vidas de un número incontables de pilotos muchos pilotos de Fórmula 1. Asistió a Didier Pironi en el Gran Premio de Alemania de 1982, al de Barichello en el viernes de ese fatídico Imola de 1994, a Mika Hakkinen en Adelaida 1995. Pero no hubo nada que pudiera hacer en los accidentes mortales de Ayrton Senna y Roland Ratzenberger.

Cuenta en su biografía que había intentado convencer a Senna de que se retirase tras el accidente de Ratzenberger, 24 horas antes de su muerte. “¿Qué más quieres? Has ganado tres veces el campeonato y eres actualmente el piloto más rápido. Vámonos a pescar”, le dijo al brasileño, pero Senna le contestó: “Sid, hay cosas sobre las que no tenemos control y no podemos dejar de hacerlas. Debo seguir adelante”.

Sid se juró a si mismo, tras la muerte de su amigo Ayrton Senna, que no iba a volver a morir otro piloto más en una pista de F1 y ha cumplido. Watkins ha sido un perseguidor incansable para llevar los niveles de seguridad de la F1 hacia lo impensado (el accidente de Robert Kubica en Canada 2007, así lo demuestra) y es gracias a este esfuerzo en conjunto con Charlie Whiting (delegado de seguridad de la FIA) y Max Mosley (ex presidente de la federación) que desde el trágico fin de semana de San Marino hasta hoy no tuvimos que lamentar otra muerte más en la F1.

El dia de la muerte de Roland