La intención es brindar más seguridad de la que ya hay. Es que siempre hay que ir un paso más allá, y teniendo en la retina el trágico accidente de Henry Surtees en la F2 (murió tras recibir un golpe de un neumático perdido en la cabeza) y el desprendimiento de la rueda del Force India en la clasificación de Hockenheim (Glock la esquivo casi de milagro luego que rebotara en el muro), es una clara señal de que hay que seguir avanzando.
"Tuve suerte de que tenía un poco de espacio detrás de Liuzzi y así poder calentar mis frenos. De lo contrario, habría ido pegado a él", declaraba al respecto Timo Glock a Auto Motor und Sport. A lo que Paddy Lowe, director de Ingeniería de McLaren, parece haber tomado nota.
"Las correas de sujeción son de gran preocupación para nosotros, por lo que hemos discutido esta cuestión con el Grupo Técnico de Trabajo y hemos acordado para el próximo año introducir una segunda correa en cada esquina", declaraba Lowe.
El mejor ejemplo fue en el año 2001 en Melbourne con la muerte de un aficionado detrás de la valla, y en 2000, cuando un bombero murió al impactarle un neumático que salió volando en Monza.
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