Es la conclusión a la que arribaron varios pilotos de renombre luego de la segunda semana de entrenamientos que está terminando hoy en Jerez de la Frontera.
A pesar de que la única diferencia importante entre los neumáticos del año pasado y de este año radica en el tamaño, dado que el delantero ahora es más estrecho, los pilotos tienen la sensación en esta pretemporada que su rendimiento en húmedo y frio está dando más problemas que en 2009.
Tras los dos días de entrenamientos en mojado, la mayoría llegaron a la conclusión que el compuesto intermedio de Bridgestone, no pasaba más de diez vueltas con un nivel de agarre bueno y en este periodo de tiempo ya estaban desgastadas. Lo que hacía que los pilotos tuvieran que regresar a boxes a poner un nuevo juego de ruedas para no empezar a perder entre dos o tres segundos.
"Después de diez vueltas rodando, el coche se comportaba como si estuviera conduciendo sobre mojado con neumáticos lisos", declaraba Kamui Kobayashi tras haberse quedado con la tanda del jueves.
"Hemos tenido algún problema de degradación de los neumáticos, pero es algo que pasó con todos los equipos," comentaba por su parte Fernando Alonso. Quien ve aquí el único punto negativo del gran trabajo que están llevando a cabo esta pretemporada con Ferrari.
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