Competencia, Tecnología, Ecología. Son sinónimos del muñequito francés en el mundo motor. Cualquier deporte que se haga sobre ruedas seduce a Michelin. Hasta el patín artístico le diría, si este se realizara alguna vez sobre pavimento.
Pero centrémonos en lo nuestro, y en la posibilidad de que reemplace a Bridgestone como proveedor de neumáticos en la F1. Los japoneses se van y no hay quien cubra su huida. Los equipos presionan porque los bocetos del auto del año que viene están en esa etapa que se comienzan a transformar en el primer modelo a escala de un túnel de viento. Y Michelin es el único que está interesado en prevenir la debacle.
Aunque a fines de 2006 la FIA echo a Michelin como amante por la ventana, la marca francesa desea volver a la F1 porque ama la competencia. Pero claro… la competencia se hace como mínimo de a dos y es aquí donde aparecen las condiciones de Michelin.
"Debemos tener competencia, no queremos ser el único proveedor. Además, tenemos que ser capaces de aprovechar la oportunidad de la competencia que tengamos para mejorar nuestra tecnología de los neumáticos. Por ejemplo, nuestros nuevos neumáticos Pilot 3 de carretera tienen en su interior tecnología desarrollada para Le Mans. Necesitamos algo como esto en la Fórmula 1 también", recalcan desde la insignia gala.
"Estamos interesados, pero hay que hacerlo de la manera correcta, así que quién sabe lo que ocurrirá", concluyó un portavoz de Michelin.
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