El piloto alemán asume el papel de ser uno de los máximos favoritos para quedarse con la corona este año. Y si no está al frente de la tabla de pilotos, no es por una cuestión personal, sino de terceros, del equipo, de la fiabilidad, del clima.
No es casualidad que de cuatro poles se quedo con tres, si es casualidad que el único Gran Premio que ganó fue precisamente en el que no hizo la pole.
El de Heppenheim nunca se cayó de la primera fila en este 2010. El problema está en que el equipo no ha sabido materializar ese dominio de los sábados en los domingos, pero bueno eso es problema del equipo y la responsabilidad de pelear por el título que le corresponde a Vettel, el germano la absorbe sin problemas.
"Yo lo veo así: hay más expectativas para este año, lo que creo que es positivo, porque demuestra que el año pasado estábamos en una buena posición y la gente espera que estemos allí de nuevo. Para mí eso es un cumplido", comentaba Vettel a la revista Red Bulletin.
Además, Vettel no se olvida de sus orígenes por lo que agradece que sea tomado como un piloto referente de la Fórmula 1.
"Por encima de todo siempre has de saber porqué estás aquí. Estoy muy contento y orgulloso de haber llegado a la Fórmula Uno. En diciembre fui a una carrera de karts, donde vi a chicos y chicas jóvenes, y fue curioso porque no me vieron como a otro piloto más. Estaban viendo a un piloto de Fórmula Uno, lo que sin duda fue una sensación extraña para mí, porque en algunos casos no soy mucho mayor que ellos. Esto demuestra que lo que haces es algo que gusta a muchas personas, y para mucha gente es el máximo de su deporte, creo que nunca debemos olvidar esto".
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