Victoria inobjetable de Raikkonen

El piloto finlandés dominó de punta a punta la cuarta carrera del año, encabezando un segundo doblete consecutivo de la escudería de Maranello en esta temporada.
A bordo de una inalcanzable F2008, Kimi Raikkonen necesito de 1h38m19s051 para quedarse con un accidentado Gran Premio en el que Fernando Alonso rompió motor ante sus aficionados y en el que Heikki kovalainen se salvó de milagro.
A diferencia de ediciones anteriores, este GP de España resultó una picadora de carne para el parque de la F1, que como en Australia, sufrió numerosos abandonos.
Sólo trece coches vieron la bandera a cuadros en la primera carrera europea del 2008, y dos veces se necesitó del safety car para poner orden en la pista. Pero las intervenciones del auto de seguridad nunca lograron a incomodar el ritmo de Kimi que estuvo acompañado en el podio por Felipe Massa, y el inglés Lewis Hamilton.
Para McLaren, Montmeló se convirtió en una pesadilla y para Heikki Kovalainen el punto que puede marcar su carrera. El finlandés sufrió el reventón de su neumático delantero izquierdo y fue a parar contra las protecciones en la curva Campsa, incrustándose entre los neumáticos de manera muy violenta. Heikki fue trasladado inmediatamente en helicóptero hacia la clínica más cercana donde fue escaneado completamente pero sin arrojar, gracias a dios, un hueso roto. El parte médico ha arrojado noticias positivas y se espera que en Turquía pueda formar parte de la grilla.
Grilla que en esta ocasión se vio revolucionada por la reaparición de Fernando Alonso y su Renault en los primeros puestos. Nada mejor que hacerlo ante su gente. Y nada peor que abandonar también ante ellos. Lo que parecía una recuperación con camino a podio, quedo en nada, porque una rotura de motor privo que el español pudiera finalizar con su estrategia. Estrategia que para Renault comenzó a arruinarse temprano con el abandono previo al de Alonso, de su compañero Nelsinho Piquet.
En BMW las cosas fueron algo distintas aunque si hubo un perjudicado en el equipo ese fue Nick Heidfeld. El alemán venía cumpliendo un papel soberbio pero la necesidad de tener que repostar al momento que estaba el safety car por el accidente de Kovalainen, le valió un stop and go que lo dejo fuera de toda lucha y a la puerta de los puntos. En contraste con su compañero Robert Kubica que siguió en los puntos y cosechó esta vez un satisfactorio cuarto lugar.
Detrás del polaco y en una gran actuación, el australiano Mark Webber logró reencontrarse con los puntos y finalizó quinto. Mientras que el inglés Jenson Button sumó los primeros puntos para Honda de esta temporada con un reconfortable sexto lugar.
Cerrando Kazuki Nakajima con un sorprendente séptimo lugar y el veterano Jarno Trulli las ocho posiciones puntuables.