El experimentado piloto español ya se había olvidado de lo que era una prueba, de cómo era el trabajo de un titular, pero la justicia llega a su tiempo y rápidamente parece haber recuperado la memoria.
En su primera jornada como piloto de Sauber, Pedro de la Rosa se instaló segundo, incluso por delante de un viejo conocido que también vuelve a la competición: Michael Schumacher.
Aunque los tiempos no son para juzgar, dado que todos trabajan en el apartado del peso y la cantidad de combustible, haber conseguido el segundo tiempo en el circuito Ricardo Tormo, por detrás del Ferrari de Massa, le ha llevado a pensar al catalán que está "menos oxidado de lo que esperaba".
"Esperaba estar muchísimo más verde y más en un circuito con mucha frenada, en el que hay que atacar bien los arcenes. Pero he llegado rápido a mi límite y para mí es muy importante", comentaba De la Rosa.
"He aprovechado todas las vueltas porque cada kilómetro es importante para llegar bien a Bahrein. Duele más el cuello, pero es normal porque es mucho tiempo sin rodar en un Fórmula 1", agregaba el español.
No obstante, De la Rosa asegura que "queda mucho por mejorar". Y que a pesar de las buenas sensaciones, sólo se trata del primer día, por lo que “no hay que sacar muchas conclusiones con los tiempos, porque los coches llevan tanques de gasolina grandes y es difícil juzgar los tiempos".
Lo más importante, según la flamante adquisición de Sauber, es que el monoplaza “ha sido muy fiable durante todas la vueltas", y "no tiene vicios".
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