Escucharlo hablar hoy a Jenson tanto por
radio, como luego con la prensa, causó zozobra. De no poder completar una
vuelta en Bahrein, a tener miedo de acelerar su coche en cada vuelta, así es la
evolución que ha tenido el británico con las mejoras que ‘en teoría’ había traído
McLaren para el GP de España.
Ojo, el mismo Jenson Button el pasado
viernes tras la primera jornada daba cuenta que este coche era el día y la
noche con el que había manejado en la pretemporada y que la mejora era
evidente. Pero algo pasó, algo le cambiaron o algo se afectó en la parte
trasera porque en carrera el coche se le volvió ingobernable. Con decirle que
Jenson calificó las primeras 30 vueltas de la carrera como las más espantosas
de su vida.
“La verdad es que ahora mismo, después de hoy no
pienso que podamos puntuar para nada este año. No creo que vayamos a puntuar a lo largo de la
temporada, pero seguramente pienso así porque hoy
ha sido un día muy difícil, si me centro en el resto del fin de semana, sin
contar la carrera, todo había ido bastante bien, así que hacer balance de este
fin de semana es un poco complicado”.
“Las tandas largas que hicimos el
viernes fueron buenas, pero hoy daba bastante miedo conducirlo. Daba
miedo cada vez que tocaba el acelerador, porque el coche me patinaba mucho de
atrás”.
"El problema está
en las curvas de baja velocidad porqué aceleras y patinan las ruedas instantáneamente,
pero a altas velocidades también daba mucho miedo al tocar el acelerador porque
perdía la parte trasera, patinaba inmediatamente. No era un deslizamiento
gradual como suele ser habitual, es muy raro.”
“Las primeras 30 vueltas han sido las más espantosas de mi vida. La parte trasera no estaba ahí. Simplemente no era normal. La parte trasera parecía que no estaba conectada a la parte delantera. La primera mitad de carrera fue bastante horrible. Unos cambios y los nuevos neumáticos al final ayudaron un poco”.
“Las primeras 30 vueltas han sido las más espantosas de mi vida. La parte trasera no estaba ahí. Simplemente no era normal. La parte trasera parecía que no estaba conectada a la parte delantera. La primera mitad de carrera fue bastante horrible. Unos cambios y los nuevos neumáticos al final ayudaron un poco”.
“Pedía constantemente ayuda a boxes, y
he tenido que hacer una gran cantidad de cambios en la configuración del coche
a través del volante, así que ha sido una carrera muy dura, espero
que todo vaya mejor en Mónaco”.
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