La libertad de los contructores tiene mayor peso en la F1 |
Según dejo entrever Bernie
Ecclestone, la reunión del Grupo de Estrategia de F1 que tendrá lugar mañana
será un fracaso y no llevara a nada, porque no hay una decisión unánime de
abordar un cambio profundo en el reglamento. Ni por
la reducción de costes, ni por una mejor F1, más competitiva, como la que
tuvimos en el pasado.
Las decisiones en el Grupo
de Estrategia se toman a partir de 18 votos, seis los tiene Ecclestone, seis la
FIA y seis los equipos. Cada idea que es aceptada por las tres partes, luego es
pasada a la Comisión de la F1 para que la apruebe. El hecho de convivir en democracia hace que si a uno de los equipos no
les cuadra, el hecho de que voten por ‘NO’ ya alcanza.
“Creo
que pasaremos probablemente cuatro o cinco horas en esa reunión. Al final,
probablemente vamos a decidir la fecha de la próxima. El problema es que
estamos en democracia. Eso no es bueno. No me gustan las democracias, porque
nunca vas a conseguir que un puñado de gente competitiva se ponga de acuerdo.
Los que ganan ahora no quieren cambiar y si empiezan a perder, entonces sí. Así
es como funciona ahora”, explicaba Ecclestone para Motorsport.com.
Para la reunión de mañana
estaban agendados varios temas como la propuesta de Michelin, de neumáticos de
18 pulgadas, motores V8 en sintonía con los V6, más potencia, rediseño de los
neumáticos, precalendario, restricciones, en fin, temas muy importantes, pero Ecclestone
duda de que lleguen a una solución de preacuerdo. De hecho, tampoco cree que se
apruebe el quinto motor para esta temporada.
“Estuvimos de acuerdo, todos los equipos,
de tener cinco motores durante el año. Tenemos cuatro en las reglas, y ahora la gente está diciendo que quizás
lo deberíamos dejar en cuatro. Los que fabrican motores no quieren
hacer más si no se les paga, los equipos no pueden permitírselo”,
explicaba.
En cuanto a la idea de
mezclar los V8 con los V6 en la grilla, como una opción para los equipos más
pequeños que no tienen la posibilidad económica de adquirir estas complejas
unidades de potencia hibridas, Bernie cree que quedara todo como está.
“Vamos
a ver lo que podemos hacer. Los constructores están aquí por la razón que crean
que están, y creo que deberían continuar haciendo eso. Creo que posiblemente los otros equipos
pueden llevar un tipo diferente de motor con el mismo rendimiento, pero por
mucho menos dinero. Estoy diciendo que lo dejaremos todo como está por los
constructores. No se toca", añade el magnate.
Lo cierto es que yo
coincido en buena parte con Bernie al creer que la democracia le esta haciendo
mal a la F1. Recuerdo cuando en su momento las cosas se hacían a su antojo,
teníamos una categoría mejor. Pero acá se ve la debilidad que en su momento no
quiso demostrar el testarudo Bernie, cuando amenazado por una F1 paralela, le
cedió buena parte de su poder a los grandes constructores para que se quedaran.
Antes había un concepto de
competición y aquella marca que no le gustaba no entraba. Aquella que quisieran
beneficios de la F1 pagaban su costo y se adaptaban a las reglas, porque si
lograban el éxito tenían varios años asegurados de ganancia en el mercado
automotriz. O acaso usted no recuerda la cantidad de vehículos que vendió Honda
a principios de los 90 o Renault a fines de la misma década. Hoy ya no es así,
hoy Bernie tiene que depender de estos constructores, de un Jean Todt facho,
demagogo que lo único que hace es política y pura política sin soluciones de
fondo.
Siempre fui partidario que
el hombre, por su naturaleza egoísta y violenta, no está concebido para la
democracia. Lo veo diariamente minuto a minuto todos los días de mi vida desde
mi profesión de policía. La democracia en su totalidad no es buena, es
simplemente la mejor excusa de cualquier discurso facho, para el propósito de todo egoísta. En la democracia eligen también los boludos y los boludos con la democracia se hacen mayoría. Y hoy la F1
sufre el egoísmo de los boludos, perdón... de los constructores.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario