Con la confirmación de Audi bajo el brazo,
la escudería de Milton Keynes ahora arremete para que se tome un rumbo distinto
en 2017. Bernie Ecclestone había ironizado en su momento que estaba dispuesto a
abandonar la F1 si eso servía para atraer a Audi. Ya no es necesario, Red Bull
ya los tiene apalabrados, pero falta el compromiso final que tiene que venir de
la máxima categoría.
Con este modelo de F1, Audi no va a
malgastar dinero para ser otro Honda. Ellos tienen bien en claro que con este
modelo de F1 no pueden pelear contra los Mercedes y no quieren gastarlo todo
para perder con su clásico rival. Si Audi se compromete con la F1, será para
ganar desde el vamos, en un plazo de dos años, no de tres o cuatro o vaya a
saber uno cuánto.
Así las cosas es que Helmut Marko,
asesor deportivo de Red Bull (que posee dos equipos de F1, Toro Rosso y Red
Bull), ha amenazado recientemente con que se irán del circo si en la reunión
del jueves no se acuerdan cambios drásticos en el reglamento técnico de la F1
que terminen de convencer a Audi.
“Espero que algo razonable salga de la reunión. Es importante no sólo para nosotros sino para el conjunto de la Fórmula 1. Las audiencias de televisión y la cantidad de gente de las gradas se han reducido; apenas hay nuevos patrocinadores. Nuestro jefe Dietrich Mateschitz ya ha indicado que tendremos que repensar nuestro compromiso si algo no cambia”, explicó Helmut Marko en declaraciones a la agencia de noticias austriaca APA.
“Espero que algo razonable salga de la reunión. Es importante no sólo para nosotros sino para el conjunto de la Fórmula 1. Las audiencias de televisión y la cantidad de gente de las gradas se han reducido; apenas hay nuevos patrocinadores. Nuestro jefe Dietrich Mateschitz ya ha indicado que tendremos que repensar nuestro compromiso si algo no cambia”, explicó Helmut Marko en declaraciones a la agencia de noticias austriaca APA.
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