Con semejante rumor no podía haber comenzado la semana. A pocos días de publicarse el calendario definitivo para la próxima temporada y de conocer la determinación que tomará la Federación Internacional del Automovilismo respecto al lugar que deja Toyota y que quiere ocupar la escudería Sauber, un nuevo equipo privado parece asomar en el horizonte de la marca japonesa para dejar sin F1 a la estructura suiza.
¿Cómo es esto? ¿De qué se trata todo este embrollo? Según informan las revistas especializadas Blick y Auto Motor und Sport, Toyota tendría información de primera mano de que podría recibir una multa de 150 millones de dólares por incumplir el Pacto de la Concordia. Y para evitar desembolsar tamaña cifra, podría cederle su puesto en la parrilla no al equipo Sauber, sino a un equipo serbio.
Se trata de Stefan Grand Prix, una formación que estaría integrada por la empresa de ingeniería AMCO y su jefe ejecutivo, Zoran Stefanovic, (quienes presentaron una denuncia ante la Comisión Europea en agosto sobre el proceso de selección de equipos llevada a cabo por la FIA) a la cual Toyota le dejaría el chasis TF110 ya casi terminado, le daría sus motores al módico precio de 5 millones de euros en 2010 y 2011, sus instalaciones de Colonia y sentaría a Kamui Kobayashi.
Todo coincide, las conjeturas cuadran como rompecabezas de estilo. Toyota evitaría su multa, dejaría en pie las bases de su equipo, también a Kamui Kobayashi. A cambio la FIA podría encontrar una salida elegante a la demanda de los serbios. A la vez que a los serbios les quedaría cerca la factoría de Colonia y contarían con el auspicio de Pascal Vasselon y del patrocinio de Toyota.
2 comentarios:
Parece un apaño, pero Toyota ha invertido mucho en su escudería y es mejor que tenga sucesor, saludos
De alguna manera, pero que se quede. Dejando motores, dejando personal o a Kobayashi, pero que sean 28 el año que viene o 26, no 24
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