Haberse enfiestado con cinco mujeres en un recreado ambiente nazista parece que le va a costar mas de 3 mil libras al sexagenario inglés y presidente de la FIA. Las imágenes difundidas por el diario inglés News of the World ha generado una enorme decepción dentro del circo de la máxima categoría, hasta el punto que en cada rincón se pide su renuncia.
En un jueves previo a cada Gran Premio, donde los micrófonos comienzan a abrirse con mayor intensidad dentro del paddock, los fabricantes hicieron saber su desprecio a los actos privados del viejo Max, calificándolos de vergonzosos.
Los primeros en manifestar su rechazo fueron las marcas alemanas de BMW y Mercedes, quienes asociadamente brindaron un texto a la prensa mostrándose avergonzados y repudiando los actos discriminatorios de Max Mosley. Más tarde Toyota y Honda también cuestionaron la actitud del presidente de la FIA.
En un jueves previo a cada Gran Premio, donde los micrófonos comienzan a abrirse con mayor intensidad dentro del paddock, los fabricantes hicieron saber su desprecio a los actos privados del viejo Max, calificándolos de vergonzosos.
Los primeros en manifestar su rechazo fueron las marcas alemanas de BMW y Mercedes, quienes asociadamente brindaron un texto a la prensa mostrándose avergonzados y repudiando los actos discriminatorios de Max Mosley. Más tarde Toyota y Honda también cuestionaron la actitud del presidente de la FIA.
Por un lado, la casa japonesa con base en Colonia, Alemania, manifestaba que "Toyota Motorsport no aprueba ningún tipo de comportamiento que pueda dañar la imagen de la Fórmula Uno, en particular un comportamiento que pueda ser tachado de racista o antisemita.”
Reclamando que cuando todos estos hechos sean esclarecidos, “le corresponda a la FIA decidir si el Sr. Mosley ha respetado los valores morales que deben adornar al Presidente de la FIA."
Mientras que Honda exigió a los integrantes del máximo organismo “que se considere el escándalo sexual de Mosley y se adopte una decisión de forma inmediata que vele por los mejores intereses de la F1 y el deporte".
Pero el rechazo no sólo venía de las escuderías, algunos pilotos de renombre también se sumaron al cuestionamiento. Como el caso de Lewis Hamilton que se mostró totalmente de acuerdo con lo que han dicho.
"Lo importante es dar un buen ejemplo. Todos nosotros, especialmente la gente joven, siempre respetamos a la gente que nos marca el camino a seguir. Estoy de acuerdo con todo lo que se ha dicho hasta el momento”, sostenía el moreno desde Shakir en declaraciones a The Sun.
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