Consciente de sus escasas opciones, pero con mucho optimismo. Así afrontará Kimi Raikkonen la última carrera del año en Sao Paulo, a sabiendas que la rivalidad de los pilotos que conducen las Flechas de Plata puede jugarle a favor.
En el día de su cumpleaños número 28, el finlandés vive con más decisión que nunca la definición del Campeonato mundial. Es que todo lo que parece tan lejos de alcanzar, o tan imposible, se puede acercar de golpe y por eso Iceman no baja los brazos.
“Tengo pocas probabilidades de ganar el título, pero como se vio en Shangai, puede pasar cualquier cosa. Ellos tienen la presión, son los favoritos y además lucharán entre sí. Con un poco de suerte nos beneficiaremos de eso", afirmó el piloto de Ferrari en las últimas horas.
A pesar de estar tercero en la tabla con 100 puntos, a tres de Alonso y a siete de Hamilton, la confianza de Kimi sigue siendo la misma. “Afrontaré esta carrera de la misma forma que las dos últimas. Mi intención es ganar, el resto ya no depende de mí. Es una situación similar a la del 2003, cuando perdí el título frente a Michael. No podemos hacer cálculos, tenemos que ganar", afirmó Raikkonen.
El nórdico destacó que la clave del triunfo estará en realizar una buena clasificación el sábado, y conseguir un coche versátil y fiable para el domingo. Lo que supone un doble desafío para Ferrari si se analiza que después de China no han tenido tiempo para mejorar sus monoplazas en Fiorano. Y que además Raikkonen nunca ha ganado en Interlagos, siendo segundo en tres oportunidades.
Si bien consideró que el piloto con más puntos siempre debe ser el favorito en condiciones normales, Iceman aseguró que lo va a dar todo. Es que para el nórdico, el mundial sería su mejor regalo de cumpleaños.
En el día de su cumpleaños número 28, el finlandés vive con más decisión que nunca la definición del Campeonato mundial. Es que todo lo que parece tan lejos de alcanzar, o tan imposible, se puede acercar de golpe y por eso Iceman no baja los brazos.
“Tengo pocas probabilidades de ganar el título, pero como se vio en Shangai, puede pasar cualquier cosa. Ellos tienen la presión, son los favoritos y además lucharán entre sí. Con un poco de suerte nos beneficiaremos de eso", afirmó el piloto de Ferrari en las últimas horas.
A pesar de estar tercero en la tabla con 100 puntos, a tres de Alonso y a siete de Hamilton, la confianza de Kimi sigue siendo la misma. “Afrontaré esta carrera de la misma forma que las dos últimas. Mi intención es ganar, el resto ya no depende de mí. Es una situación similar a la del 2003, cuando perdí el título frente a Michael. No podemos hacer cálculos, tenemos que ganar", afirmó Raikkonen.
El nórdico destacó que la clave del triunfo estará en realizar una buena clasificación el sábado, y conseguir un coche versátil y fiable para el domingo. Lo que supone un doble desafío para Ferrari si se analiza que después de China no han tenido tiempo para mejorar sus monoplazas en Fiorano. Y que además Raikkonen nunca ha ganado en Interlagos, siendo segundo en tres oportunidades.
Si bien consideró que el piloto con más puntos siempre debe ser el favorito en condiciones normales, Iceman aseguró que lo va a dar todo. Es que para el nórdico, el mundial sería su mejor regalo de cumpleaños.
Fuentes: F1Live.com
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