La Federación Internacional del Automovilismo ha sentado postura y referencia para la picardía que ha tenido la escudería McLaren en la clasificación del GP de Canadá con Lewis Hamilton.
El reciente ganador de Montreal se había quedado con la pole el sábado último rompiéndole el invicto a los Red Bull en la clasificación, pero no terminó siendo esta la noticia sino que terminó ganando mayor atención el hecho de que el moreno no pudo llegar a los boxes con su MP4-25 por falta de combustible. Le quedaba un resto en realidad, pero si lo hacía no iban a quedar muestras para la FIA.
En consecuencia, el piloto de McLaren fue multado con 10.000 dólares, pero dejando arriba de la mesa un interrogante: “¿qué pasa si ahora todos comienzan a hacer lo mismo?”
"No sé todos los detalles así que es difícil hacer un comentario. Pero no debemos llegar a esta situación, en la que los coches se quedan sin combustible después de su última vuelta, porque quieren salir a pista con el menor peso posible," declaraba Ross Brawn en ese entonces luego de la clasificación.
Por lo que luego se resolvió en una reunión antes de la carrera que en el futuro, cualquier coche que se quede sin combustible al final de la calificación será llamado a declarar por los comisarios, arriesgándose a recibir una sanción deportiva si la razón para detenerse no es «de fuerza mayor».
La advertencia fue lanzada por Charlie Whiting y los equipos parecen haberla tomado.
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