La escudería germana quiere seguir ascendiendo en la grilla y apunta al podio en el GP de Italia. Para ello, piensan hacer uso de un alerón trasero más pequeño con el fin de reducir la resistencia y disminuir los niveles de carga aerodinámica en el parque de la velocidad para no perder de vista a las flechas de plata que a priori se presenta como protagonistas.
Como el circuito transcurre mayoritariamente por largas rectas, aunque posee tres pronunciables chicanas, la falta de carga aerodinámica en las rectas dará más efectividad que cualquier sostén aerodinámico que se encuentre en las curvas para tratar de ser veloz en los virajes.
Willy Rampf, como Director de Ingeniería de BMW, lo explica mejor
"Esta es la última auténtica pista de alta velocidad en el calendario. En las cuatro largas rectas has de mantener el nivel de rozamiento bajo, es crucial, así que tenemos que rodar con menos carga aerodinámica que en cualquier otro sitio durante la temporada, lo que implica el uso de un alerón delantero modificado y un alerón trasero nuevo y extremadamente pequeño."
"Un reto adicional para los pilotos e ingenieros es dotar a los coches de una estructura mecánica que garantice una buena estabilidad en las frenadas y permita el paso por los bordillos de forma agresiva, ya que esto es absolutamente esencial en el establecimiento de un tiempo de vuelta rápido. Estoy muy ilusionado con la carrera, ya que siempre hay un ambiente muy especial en Monza."
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