Tras ganar en Monza el título de la GP2, el ahijado deportivo de Michael Schumacher ha expresado su confianza de quedarse con la primera butaca que estará dejando Nico Rosberg a final de esta temporada.
El reemplazo de un alemán por otro alemán le reportaría a la escudería de Grove una buena de suma de euros ya que el nuevo Nico traería consigo las mismas empresas que acompañaron a Michael Schumacher en su extensa e híper exitosa campaña deportiva.
En su camino a la F1, la trayectoria de Nico no es muy distinta a la de su mítico padrino. El currículum del ahijado de Michael es sencillamente impecable. Además del reciente campeonato de GP2, hay que agregarle los títulos de Fórmula BMW, A1GP, Masters F3 y la F3 europea, lo que ha llevado a Frank Williams a considerar que "Nico está listo para la F1".
De manera que sí el título de GP2 es garantía de paso a la F1, teniendo en cuenta que desde su creación sólo su predecesor Giorgio Pantano no se trasladó a la categoría reina del motor, el paso de piloto reserva a titular tendría que ser un mérito trámite para Hulkenberg.
"Eso espero y lo creo. Lo veo bien. Me siento muy bien en Williams y con mucho gusto me quedaría allí", declaraba mientras tanto el joven alemán de 22 años.
A lo que su manager Willi Weber, el mismo que tiene Michael Schumacher, agregó que "estamos negociando con varios equipos y Williams tiene una opción".
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