El piloto británico ha vuelto al ruedo y al final no estaba tan oxidado como se creía. Pero eso es apenas un dato dentro de una jornada en la que su mayor preocupación ha pasado por acostumbrarse a las nuevas funciones que tiene en el volante.
El KERS no es problema, ya lo tuvo en 2009 y de hecho entró en la historia por convertirse en el primer piloto que logra una victoria en la F1 con este elemento de recuperación de energía. Pero junto al KERS se implementa el alerón ajustable y acostumbrarse a las dos cosas juntas si es problema.
“Vamos a tener mucho en que pensar y que hacer durante la vuelta y hay que segmentarla en unos determinados porcentajes, así que una vez sales de la curva 3 utilizo un 20 por ciento y en la salida de la curva 6 uso el 45 por ciento, por lo que si lo divides en cuatro o cinco veces, tienes que está siempre mirando el tablero de instrumentos,” comentaba el piloto moreno.
“Realmente tienes que concentrarte más - y ahora tenemos eso y el alerón trasero. En el simulador se siente bastante frío, pero cuando tenemos el KERS va a variar mucho", aseguró Lewis haciendo referencia a la utilización de las dos cosas juntas.
Mientras que al ser consultado sobre su inactividad tras las largas vacaciones bromeó: "De inmediato cuando salí, mi tercera vuelta fui el más rápido de mi parte del día, así que es muy fácil de estar de nuevo en el trabajo y no estaba tan oxidado como yo pensaba que iba a estar, así que es bueno".
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