10 de agosto de 2015

Lo durmieron….


Insólito robo fue el que sufrió Jenson Button a comienzos de esta semana, mientras pasaba días de sus vacaciones en una villa francesa junto a su esposa Jessica Michibata y tres amigos.

Según informó la policía local, los astutos ladrones intyectaron gas anestésico en los conductos del aire acondicionado y así pudieron garantizar un sueño tranquilo a sus víctimas para poder trabajar con comodidad.

Fuentes policiales agregaron que el valor de todo lo sustraído superaría los 425.000 euros, conformando gran parte del botín el anillo de compromiso que Jenson le había regalado a Jessica, una joya de cinco quilates que está cotizado con un valor estimado de 350.000 euros.

“Los ladrones estuvieron en la misma habitación que Jenson y Jessica, pero ellos no se dieron cuenta por los efectos del gas. Con los otros tres amigos ocurrió la misma situación. Cuando se dieron cuenta de todo fue al despertar a la mañana siguiente”, contó un allegado al piloto británico.

Se estima que los autores del hecho hicieron un sesudo trabajo de estudio previo a dar el golpe, lo que puso más intranquilo a Button, ya que hubo un par de noches en los que él y otros amigos se quedaron fuera, dejando a las chicas solas dentro de casa. Por lo pronto, se sabe que el piloto de McLaren abandonó la casa al día siguiente del robo.

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