Tras concluir la sesión de clasificación del sábado en Silverstone, había caras de poco ánimo en el box de Toro Rosso. Ni Sebastien Buemi ni Jaime Alguersuari había conseguido pasar a la Q2, afectados por la lluvia que había caido a último momento.
Jaime apenas conseguía el decimoctavo puesto y Sebastien Buemi el decimonoveno. Fue entonces cuando Helmut Marko se acercó al box y convencido de que no iba a puntuar en carrera, le hizo una apuesta al piloto español. “Si consigues sumar puntos el domingo, te pagaré el doble de los puntos que consigas sumar; pero si no lo consigues, tú me darás una caja de mi vino español favorito”.
Pues bien, como en Valencia, largando desde el 18vo cajón, Jaime consiguió entrar en la zona de puntos. Llegó décimo, apenas un punto, pero que alcanzó para cerrarle la boca al hombre que precisamente se encarga de buscar talentos para Red Bull.
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