Antes del GP de Australia el experimentado piloto italiano se quejaba de la durabilidad de los neumáticos, de su apresurada degradación. Ahora que la primera carrera del mundial ha pasado, el reproche es por la falta de temperatura.
“La cosa más importante que debe ser dicha es que todos los resultados del fin de semana, ya sea positivos o negativos, tiene una causa común: los neumáticos Pirelli”, declaraba Jarno Trulli al periódico Repubblica.
“Nos han dejado a todos es estado de shock. No me refiero si fueron mejores o peores de lo que esperábamos, lo que me refiero es que fueron completamente diferentes: es como si los hubieran cambiado desde los últimos test en Barcelona. Durante el invierno, en cada equipo, hemos trabajado con neumáticos que se deterioraban inmediatamente. Era una de sus características y ha habido alguna polémica también. Así que pensamos que el problema estaba en hacerlos que durasen el tiempo suficiente.”
“En Melbourne, nos hemos encontrado con neumáticos que no tenían problemas de durabilidad, pero a cambio, se oponían inmensamente a conseguir su temperatura,” agregaba.
Y apunta que fue por esta condición que Ferrari seguramente clasificó mal.
“Si los neumáticos no consiguen su temperatura, es imposible conseguir el rendimiento. Durante la carrera, solo dos pilotos no tuvieron problemas en conseguir la temperatura en los neumáticos. Todos los demás, unos más que otros, nos costó. Incluso Webber. Solo piensa en Vettel y Webber: Sebastian dominó, mientras que Mark en un momento, perdería dos segundos por vuelta de una de Alonso. En mi opinión, es la misma razón por la que Ferrari clasificó mal.”
Por lo que en esta temporada, la clave no estará en el KERS, o en el alerón móvil, sino en los neumáticos Pirelli, ya que quedo bien demostrado que el desafío real este año pasará por “entender cómo funcionan los neumáticos. Será una de las claves de la temporada.”
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