Cuando la historia ya se haya
escrito y la temporada 2015 haya llegado a su fin, vamos a empezar a recordar a
este nuevo modelo antes que nada como la Ferrari que marco una nueva etapa, la
etapa pos Alonso, la etapa de la transformación.
Pero no porque el nuevo diseño haya
sido revolucionario, pues vemos en la SF15-T la tendencia de este año, menos
carga aerodinámica en el tren delantero, un morro más caído y estrechamiento en
el tren trasero. Sino porque Ferrari inicia una nueva dirección, muy distinta,
de muchos cambios. Nuevo presidente, nuevo jefe de equipo, nuevo motorista y
nuevo piloto estrella. Sólo un vestigio quedó del pasado, acaso el más
oportuno, el hombre que le dio su último título.
Como será
que no hay tanta transformación en el chasis que la nueva SF15-T mantiene el
sistema pull-rod en la
suspensión delantera. Es que hay que saber interpretar un aspecto muy
importante de la concepción de un coche de F1 y es que como todo chasis nuevo, el
origen de su diseño data de un año de anticipación, sus bocetos nacen al mismo
tiempo que su predecesor gana sus primeros kilómetros de pista, por tanto sin
cambios abruptos en la normativa técnica, la tendencia es la evolución. Sólo se
aprecian diferencias significativas con la F14-T en la trompa, que con la
pérdida de carga aerodinámica ha dejado atrás la figura de la trompa de oso
hormiguero para convertirse en un largo pico de pato, mucho más estética y
refinada, que al igual que el nuevo McLaren supera la línea de su alerón
delantero.
En el
resto del coche no hay novedades, si afinamientos. La zona donde se sitúa la caja de cambios
y la unidad de potencia se ha minimizado al máximo para tratar de aprovechar el
mayor flujo aerodinámico posible que llegue al tren trasero. Los pontones mantienen la misma
línea, sin aparentes cambios. La chimenea en la zona
superior del chasis mantiene el diseño de tres divisiones, una superior y dos
subdivisiones en la parte inferior, el único cambio -aunque de
poca importancia- es que la entrada principal de refrigeración ha sido achatada
con respecto a la de 2014.
Su diseñador
James Allison había declarado previo a su presentación que la nueva Ferrari
cumplía con los tres requisitos que le habían pedido, que fuera rápida, más
fácil de conducir y más bonita. Más
bonita que la del año pasado es, sabremos al final del año cuando la historia
ya se haya escrito si fue rápida y fácil de conducir. Por el momento, sólo
podemos decir que es la Ferrari que marca el cambio.
1 comentario:
jili
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