Con Fernando Alonso para mucho tiempo en Ferrari, con McLaren envuelto en sus confusiones técnicas y Mercedes sin cupo para otra figura alemana, estaba claro que Sebastian Vettel no tenía mucho que pensar.
Le ofrecían un nuevo sueldo de entre 12 y 14 millones de euros por año. Menos compromisos publicitarios. Y con su continuidad se garantizaba la permanencia de Adrian Newey hasta el final de su nuevo contrato. Y se sabe que donde está Newey, está el mejor coche de la grilla. De manera que no había mucho que demorarse para decir: “si, acepto”.
“La extensión de contrato de Sebastian hasta 2014 ha sido de mutuo acuerdo. Ambas partes queríamos continuar con la asociación, así que no fue un gran problema”, explicó Helmut Marko, responsable de la división de deportes del motor de la marca de bebidas energéticas y gestor de la carrera de Vettel.
Sebastian Vettel seguirá cuatro años más en el equipo Red Bull y me temó que por cuatro años más, con Newey como diseñador, seguirán siendo la referencia en la parrilla de la F1.
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