El gobierno del estado de Victoria ha asegurado en las últimas horas que el circuito callejero de Melbourne continuará presente en el mundial siempre que la carrera forme parte del calendario de la Fórmula 1.
La afirmación llego después de una audiencia parlamentaria donde el ministro de grandes eventos, Louise Asher, aseguró que el cambio de circuito quedaba descartado porque supondría un gasto de 230 millones de euros.
“El Gran Premio se va a quedar en el Albert Park. Una de las razones por las que la marca de Melbourne ha tenido tanto éxito, es que el Gran Premio está en Albert Park”, declaraba Asher.
Claro que esto tampoco garantiza la continuidad de la carrera, una vez que el contrato se venza en 2015, ya que la realización del evento sigue siendo un gran gasto para los contribuyentes que el Estado no está dispuesto a seguir asumiendo.
“Cuando vayamos a negociar, jugaremos duro. Creo que los contribuyentes podrían obtener un mejor trato si el contrato fuese menor para mi buen amigo el Sr. Ecclestone y mayor para los contribuyentes de Victoria”.
“Nada me gustaría más que el Gran Premio se mantuviese, con un contrato que fuese fabuloso para los contribuyentes, la cuestión es si podemos conseguir eso”, concluyó Asher.
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